Un grupo de científicos de la Universidad de Vigo y el Museo de Australia publica el descubrimiento de una nueva especie de crustáceo endémico de Galicia, en la ría de O Grove (Pontevedra), al que han denominado Uromunna naherba. Pertenece a la orden Isopoda (suborden Peracarida), el más diverso de este grupo de animales.
Estos Peracarida se encuentran en todo tipo de ambientes, especialmente los marinos, aunque también hay especies terrestres y de agua dulce. Uromunna naherba mide entre 0,6 mm y 1,5 mm de longitud y vive entre las hojas y en los rizomas (tallos subterráneos) de ciertas algas marinas.
Una peculiaridad es que ninguna de las etapas de su ciclo de vida tiene carácter dispersivo. Esto significa que el animal en ningún momento cubre grandes distancias, ya sea para colonizar nuevos hábitats o para encontrar nuevos sustratos. Se trata de una especie que en vez de nadar, camina sobre el fondo del mar, especialmente en zonas cubiertas de algas y plantas.
Todo esto, sumado a que se trata de una especie de pequeño tamaño, implica que es propensa a la especiación, ocurriendo el endemismo regularmente. Como su capacidad de desplazamiento es limitada, los individuos de la población se reproducen entre sí, evitando el cruzamiento con otras poblaciones. Las mutaciones genéticas se propagan así rápidamente dentro de las poblaciones locales, pero no se extienden a poblaciones más alejadas. Con el tiempo, una población en particular acumula tantas mutaciones que la diferencian de otros grupos, favoreciendo el proceso de especiación.
Según la FAO, la producción mundial de la acuicultura de crustáceos se sitúa en 7.000 Tm o aproximadamente el 10% del volumen total de la acuicultura, representando sin embargo el 22% de su valor. Con una tasa de crecimiento anual del 11% durante la última década, la acuicultura de crustáceos se ha convertido en una de las industrias de producción animal en mayor expansión del mundo, liderada por camarones y langostinos (Penaeus, Macrobrachium).
No obstante, esta actividad continúa muy por detrás de otras industrias agroganaderas en la asimilación de biotecnologías avanzadas, capaces de mejorar rendimientos y valor de producción. Los objetivos de producción se centran no sólo en el consumo humano, sino también como fuente de valiosos bioproductos tales como quitina, quitosano, glucosamina, astaxantina, etc.
A pesar de que el volumen del comercio de especies de crustáceos en el noroeste español alcanzó las 1.000 toneladas en 2014, con un valor total estimado de 16 millones de €, en la actualidad no hay proyectos empresariales de acuicultura centrados en la producción de crustáceos en Galicia. Últimamente se han producido avances técnicos importantes para el cultivo de especies de relevancia comercial como la nécora (Necora puber), el centollo (Maja squinado), la cigala (Nephrops norvegicus), el camarón (Palaemon serratus), el buey de mar (Cancer pagurus ), el percebe (Pollicipes pollicipes), el bogavante (Homarus gammarus), el cangrejo real (Chaceon affinis), la langosta (Palinurus elephas) o el santiaguiño (Scyllarus arctus).